«El trozo de piedra más triste, conmovedor y contundente del mundo», así definió Mark Twain una de las esculturas de piedra más antiguas de Suiza, el Monumento al león de Lucerna, también conocido como el León Moribundo de Lucerna.

Imagen: mbell1975 – Flickr

El increíble monumento se encuentra tallado en roca de arenisca, cerca del borde oriental de la ciudad medieval de Lucerna, a orillas de un lago.

La historia del monumento nos lleva a los acontecimiento de la Revolución Francesa, concretamente al 10 de agosto 1792, cuando una turba de furiosos plebeyos se reunieron en el Palacio de las Tullerías en París, exigiendo la ejecución del rey Luis XVI y su familia.