El Castello di Vicarello es un lugar especial. Ubicado en una colina con vistas a la naturaleza al sur de la Toscana, ofrece un espacio para los placeres sensoriales: ver, degustar y relajarse en un entorno maravilloso.

Este castillo del siglo XI ha sido restaurado con esmero por los propietarios actuales durante un período de 30 años. Sus arcos medievales nos llevan a las 6 suites y a una villa, en donde cada detalle tiene un toque original y único, las suites tienen decorados individuales – lo contrario de la cultura corporativa del hotel- pero sigue contando con las mismas facilidades tecnológicas que cualquier hospedaje moderno, tales como la rápida conexión WiFi en todas sus instalaciones.

El desayuno se sirve bajo un dosel de la viña. Por la noche, antorchas encendidas sobre los caminos adoquinados brindan un ambiente íntimo al huésped. Hay una gran cantidad de terrazas, techos y rincones sombríos en donde sentarse con una copa, una comida, o para probar uno de los excelentes vinos de la finca. Un lugar del que no provoca escapar jamás!

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