Los niños pequeños son como esponjas, por lo que es muy conveniente enseñarles a hacer cosas desde que son muy pequeños, siempre bajo la supervisión de un adulto responsable. Por eso los sistemas educativos de una gran cantidad de países tienen en sus métodos de enseñanza clases dedicadas a hacer manualidades y actividades orientadas a potenciar la creatividad de los pequeños, imprescindibles para conseguir que sus habilidades naturales mejoren o analizar con detenimiento cual es la mejor actividad para cada uno de ellos de acuerdo a las cosas que les gustan o adaptar cada una para hacerla más agradable y conseguir que los niños aprendan y estén más atentos cuando hacen algunas cosas.

Las manualidades pueden ser de muy diversas temáticas: podemos pintar, hacer construcciones con palillos, recortar cartulinas para hacer murales… todo lo que se nos pueda imaginar.

Uno de los principales beneficios es que resulta una forma cómoda de que los niños aprendan, pues podemos irles explicando algunas cosas mientras se realiza la actividad, aunque parezca que los niños no prestan atención mientras les hablamos, su pequeños cerebro asimilará el aprendizaje con experiencias agradables, lo que con el tiempo resultará en que estos sean mejores estudiantes.

El dibujo siempre será la mejor forma para estimular la imaginación del niño y que mejor si se hace de una forma más creativa para seguir ejerciendo una gran curiosidad a su cerebro, otra forma de pintar es por medio de la pintura vigorosa, debido a la fuerza que se tiene que ejercer para poder llevarse a cabo esta manualidad y que sin duda necesitará de la energía de los pequeños. Se necesita: un marco de fotografía viejo, ligas de hule grandes y resistentes piezas grandes de papel, pinceles de hule espuma y pinturas de tempera recientes.

Debes de estirar varias ligas de hule sobre un marco de fotografía vacío,  el niño debe de hacerlo con cuidado para que no termine pegándole la liga si no se atora bien. Coloca una hoja de papel sobre la mesa para colocar el marco encima. Pinta las ligas con cuidado y por completo con los pinceles de hule espuma sumergida en la pintura y si quiere el niño que mezcle los colores.  El niño debe de agarrar la liga, estirarla hacia arriba y soltarla para que pegue sobre el papel y se empiecen a hacer las primeras pinceladas.

Si crees que es necesario añade más pintura, al terminar retira el papel y comienza con un nuevo diseño. Tal vez tendrán que limpiar las ligas con una esponja húmeda si crees que es necesario. Para hacer la manualidad más entretenida es recomendable que el niño use un marco más grande con un solo color, mueva y gire el marco para lograr diferentes diseños sobre el papel. Si usa marcos pequeños con un color diferente para moverlos por toda la hoja. Si quieren algo diferente usen pintura claro sobre un papel de color negro. Puedes cambiar las ligas de hule por ligas de modista.