Mallorca es uno de los mejores lugares a los que podemos ir en verano para escaparnos de la rutina y poder pasar tranquilamente unos días, aunque también se pueden pasar unos cuantos días disfrutando de fiesta en la isla. Una de las principales características de la isla de Palma de Mallorca es que tiene unas excelentes playas y calas en las cuales nosotros podemos pasa todo el día y la noche disfrutando de las excelentes vistas al mar y a las estrellas que podemos contemplar todas las noches desde cualquier lugar de la isla.

La Almudaina es el Palacio Real de Palma de Mallorca, esta misma una de las múltiples residencias de la Familia Real Española y en sus muros recoge la historia de las islas baleares desde los asentamientos megalíticos.

El Palacio ha sido reconstruido en el siglo XIV y actualmente conserva esas características de origen romano que se le atribuyeron en su construcción y en la posterior reconstrucción en la cual se le añadieron los palacios del Rey y la Reina.  La isla de Mallorca nos ofrece este palacio y otros tantos más edificios para que los disfrutemos en una visita a la isla. Los objetos que se utilizan en la decoración del palacio proceden de otros sitios de la realeza de los siglos XVII, XVIII, XIX. La historia de este castillo es muy amplia y abarca muchos siglos en los cuales los acontecimientos sucedidos no han sido pocos.

Palma de Mallorca es un excelente sitio para pasar las vacaciones puesto que es una isla con unas excelentes temperaturas si queremos visitarla en verano, sus temperaturas en esta estación del año están por encima de los 30 grados centígrados por lo que es perfecto para que vayamos a tomar el sol a la playa. En esta isla podemos ver kilómetros de playas las cuales la mayoría son de aguas cristalinas pero siempre existen aquellas playas las cuales son preferidas por los turistas e incluso por los mismos residentes de las islas.

La isla de Mallorca está caracterizada por sus estructuras de estilo gótico, puesto que la época en la cual predominaba este estilo fue en la que más se construyeron edificios de gran tamaño, uno de ellos es el castillo de Bellver que está a tan solo 3 kilómetros de la ciudad de Palma de Mallorca, por lo que es especialmente accesible para todo aquél que quiera visitarlo en cualquier momento.

La principal característica de este castillo del siglo XIV es que tiene unas magníficas vistas gracias a que está situado en un monte a más de 100 metros de altura del nivel del mar, desde este castillo se puede ver toda la ciudad de Palma, el puerto y la sierra de Tramontana y Pla de Mallorca, de aquí es de donde recibe su nombre, que si lo traducimos al castellano significa “bella vista”. Además su forma lo convierte en un castillo muy peculiar, puesto que es el único castillo de forma circular en España y uno de los pocos castillos que podemos encontrar con esta forma en todo el continente europeo, una razón más para ir a visitar este ejemplar edificio.